La Semana Santa en Navarra se vive con fervor, silencio y emoción. Muy cerca de Andosilla, pueblos con siglos de historia celebran procesiones, actos litúrgicos y representaciones que merecen ser vividas. Si visitas la zona en estas fechas, te esperan experiencias llenas de tradición y sentimiento.
Procesiones históricas que te transportan
Navarra y La Rioja Baja conservan algunas de las celebraciones de Semana Santa más auténticas del norte de España. Muy cerca de Andosilla, estos son algunos de los lugares más destacados:
🕯️ Calahorra (a 15 min) – Declarada de Interés Turístico Nacional
La Semana Santa de Calahorra es una de las más impresionantes de la zona. Sus procesiones son solemnes, con pasos bellamente decorados y cofradías que conservan trajes centenarios. Destaca la Procesión del Santo Entierro el Viernes Santo, una de las más multitudinarias.
🕊️ Lodosa (a 10 min) – Tranquilidad y fervor popular
Pequeña, recogida y profundamente sentida. Así es la Semana Santa en Lodosa, donde destaca la procesión del Silencio, que recorre el casco histórico bajo el sonido de tambores y cornetas. Un plan perfecto para vivir la espiritualidad con calma.
⛪ Estella (a 50 min) – Tradición y patrimonio
Estella, joya del Camino de Santiago, combina su rico patrimonio con actos religiosos de gran belleza. Las procesiones recorren calles empedradas entre palacios e iglesias románicas. Ideal para una escapada de día.
Más que religión: arte, cultura y emociones
Incluso si no eres especialmente devoto, la Semana Santa en Navarra merece la pena por su valor cultural. Las imágenes procesionales son verdaderas obras de arte, los pasos están acompañados de música en directo y el ambiente que se respira invita al recogimiento.
Además, muchos pueblos celebran representaciones vivientes de la Pasión, como en Mendavia o Viana, donde actores locales dramatizan los últimos días de Jesús con una implicación conmovedora.
Un plan perfecto desde el Hotel Villa de Andosilla
Si te alojas en el Hotel Villa de Andosilla durante la Semana Santa, estás a un paso de todas estas tradiciones. Puedes combinar tu escapada con paseos por la ribera del Ebro, catas de vino en bodegas cercanas o simplemente descansar en un entorno tranquilo y acogedor.
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