Colegiata de Santa María de Roncesvalles
3 RUTAS PARA INICIARTE EN EL CAMINO DE SANTIAGO EN NAVARRA

En los brumosos Pirineos, las piedras de la Colegiata de Ronces Valles dan forma a historia y leyenda: un enclave destacado en el Camino de Santiago, hotel y hospital para la mayoría de los peregrinos, que es el inicio de la ruta jacobea hacia Santiago de Compostela.

Este pequeño rincón del norte de Navarra, escenario de la legendaria Batalla de Roncesvalles recogida en el poema medieval «El Cantar de Roldán», no se olvida fácilmente. La impresionante belleza del entorno hace que los visitantes se detengan y sucumban a su encanto.

El enclave pirenaico de Ronces Valles, en el noroeste de Navarra, cerca de la frontera con Francia, es un referente del Camino de Santiago y uno de los mejores ejemplos del gótico francés en la península: la Colegiata de Santa María. Los descendientes de Ibañeta de Luzaid/Varcaros nos acercan a esta antigua posada-hospital construida a finales del siglo XII y principios del XIII para atender a los peregrinos peregrinos del I Periodo de Santiago que viajaban por los Pirineos.

Su Historia

Roncesvalles siempre ha sido una visita obligada. Los celtas entraron en la península por allí, y más tarde, los celtas entraron en la península por la calzada romana que unía Burdeos con Astorga. En el año 778 tuvo lugar en el Cañón de Valcaros la Batalla de Roncesvalles, donde la retaguardia del ejército de Carlomagno comandado por Roldán fue derrotada por los vascos bajo la escolta de la élite noble franca.

La batalla se extendió por toda Europa y dio lugar a la epopeya del siglo XII «La canción de Roldán».

Otro hito en su historia se produjo en el siglo siguiente: en el año 813 dC se descubrió en Galicia la tumba del Apóstol Santiago, poco después de la peregrinación a Compostela de todo el mundo cristiano. Una de las rutas jacobeas, impulsada por Sancho III Mayor para convertirse en la más importante, por los Pirineos y por Roncesvalles.

Para atender a los peregrinos se construyó en el siglo XII un convento hospitalario en lo alto del monte Ibañeta. Más tarde, por impulso del obispo de Pamplona y del rey Alfonso el Luchador, se construyó en el llano el Hotel Hospital y la Colegiata de Ronces Valles.

Durante la Edad Media, cuando se levantaron nuevos edificios, la colegiata cobró gran importancia debido a su vasto dominio y al creciente número de peregrinos. A partir del siglo XVII, Roncesvalles experimentó contratiempos similares a los del Camino de Santiago, y su legado fue menguando en consecuencia.

A principios del siglo XX, tras escapar de la desamortización, comenzó una lenta recuperación. En los últimos años, la Colegiata ha visto un resurgimiento de la peregrinación a Santiago y ha sido elegida en muchos casos como punto de partida de la Vía de Compostela.

El arte en la Colegiata de Roncesvalles

Entre el conjunto de colegiatas destaca la Iglesia de Santa María, construida a finales del siglo XII y principios del XIII. Su trazado se ajusta al estilo gótico francés. Su planta tiene tres naves, siendo la central de doble ancho y cubierta con bóvedas de crucería.

La cabecera es pentagonal y está iluminada por hermosas ventanas góticas decoradas con modernas vidrieras. En el lado izquierdo de la fachada se levanta una torre defensiva construida en el siglo XIV.

En el altar mayor del templo se alza la imagen de Santa María de Roncesvalles, del siglo XIV, una bella talla gótica de madera cubierta con decoración en plata y oro. Por el lado de la Epístola se accede al claustro, que fue reconstruido en estilo cisterciense tras el derrumbe del antiguo claustro gótico en 1600 a causa de las fuertes nevadas.

El claustro conduce a la Iglesia de San Agustín, una antigua iglesia gótica de planta cuadrada. En su centro se puede ver el sepulcro del rey Sancho VII el Fuerte. La losa de piedra que lo cubre es una estatua de mediados del siglo XIII que refleja la majestuosa altura del soberano.

A principios del siglo XX, la iglesia fue iluminada por la luz a través de las vidrieras. Cuenta la historia de la victoria del rey sobre los almohades en Las Navas de Tolosa (1212), de donde trajo la maza y las cadenas, que podéis ver en esta sala. Según la tradición, estas cadenas forman el escudo de Navarra.

Otro edificio de Roncesvalles, el más antiguo de todos, es la Iglesia del Espíritu Santo o Silo de Carlomagno, del siglo XII, donde, según cuenta la leyenda, Roldán vivió en Esta es la espada. ronces valles

Junto a ella se alza la Iglesia de Santiago, o Iglesia de los Peregrinos, de original estilo gótico. En su interior se encuentran las campanas del antiguo monasterio de San Salvador de Ibagnata, utilizadas para guiar a los peregrinos en los días de niebla.

Fuente e imagen : https://turismo.navarra.com/item/colegiata-de-santa-maria-de-roncesvalles/